Te metes en la bañera, te olvidas del tiempo que pasa y tus dedos ¡se arrugan! ¿Por qué pasa esto? Algo que nos desconcierta y nos desagrada bastante, pues la sensación de tener los dedos arrugados suele no gustar nada.
Hoy descubrirás la similitud que hay entre que se te arruguen los dedos y los neumáticos.
El cuerpo es sabio
Nuestro cuerpo reacciona ante diversas situaciones de
forma natural, predeterminada. Por eso, muchas veces no logramos encontrar una explicación. En el caso de los dedos arrugados, la explicación está clara. Los
dedos se arrugan con el fin de
mejorar el agarre de objetos.
En un estudio, publicado en la revista Biology Letters, se pidió a personas voluntarias que recogiesen canicas mojadas de diferentes tamaños. Primero lo hacían con las manos secas y luego con los dedos arrugados, tras estar media hora en agua caliente.
Su relación con los neumáticos
El resultado del estudio fue que las personas eran más rápidas con las canicas si tenían los dedos arrugados que secos. Por lo tanto, los dedos se arrugan para tener un mayor control de los objetos húmedos, resbaladizos o que se encuentran bajo el agua. Solamente, para estos casos en concreto.
Pero, esto no solo ocurre con nuestras manos, ¿qué hay de nuestros
pies? Los dedos de los pies también se arrugan, aunque seamos menos conscientes de ello. Todo ello hace la misma función que las
huellas de los neumáticos, ya que permiten un
mayor agarre,sobre todo cuando la carretera se encuentra mojada.
Ahora que ya conoces porqué se te arrugan los dedos, ¡no te molestes con ellos! Es una reacción natural que nos permite adaptarnos a situaciones, en este caso, húmedas.