Durante años numerosas personas han afirmado que sentían flotar sus cuerpos y se veían a sí mismas desde el exterior. Un equipo de científicos encontró a alguien que dijo poder hacerlo y la sometieron mientras a un escáner cerebral.
Andra M. Smith y Claude Messierwere de la Universidad de Ottawa (Canadá), investigaron el fenómeno del desdoblamiento (experiencia extracorporal) y publicaron los resultados de sus descubrimientos en la revista ‘Frontiers of Human Neuroscience’.
“Fue capaz de verse girando en el aire por encima de su cuerpo, en posición horizontal y rodando con el plano horizontal. Informó a veces de verse moviendo desde arriba, pero se mantuvo al tanto de su inmóvil cuerpo ‘real’. La participante dijo no sentir emociones particulares vinculadas a la experiencia”, narraron los científicos canadienses en un informe.
La imagen de la resonancia magnética mostró una “fuerte desactivación de la corteza visual” y “la activación de la parte izquierda de varias áreas relacionadas con la imaginería cenestésica”, que incluye imágenes mentales del movimiento corporal. Esta es la parte del cerebro que es responsable de interactuar con el mundo. Es lo que nos hace sentir que el cuerpo está en relación con el mundo.
Esta es la primera vez que este tipo de experiencia se ha analizado y documentado científicamente.
Los investigadores saben que las experiencias extracorporales pueden ser inducidas “por traumas cerebrales, la privación sensorial, experiencias cercanas a la muerte, drogas disociativas y psicodélicos, deshidratación, sueño y estimulación eléctrica del cerebro, entre otros. También puede ser inducida deliberadamente por algunos”. Pero este puede ser el primer caso documentado de alguien que puede entrar en esta condición voluntariamente.
“Este no es un viaje astral descrito por los místicos. No hay actividad paranormal de ningún tipo”, aseguran investigadores. Las experiencias extracorporales son un tipo de alucinaciones provocadas por algún mecanismo neurológico.
Los investigadores de este estudio creen que este mecanismo neurológico puede estar presente también en otras personas y que algunas -como esta mujer- pueden entrenarse para activarlo.